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¡Adiós al estrés en el trabajo!

Las razones por las que una persona se estresa en el trabajo son infinitas. Aquí solo algunas de las que pasan por mi cabeza en este momento:

  • Tienes muchísimo trabajo y por más que trabajas arduamente la carga laboral no baja
  • Tu jefe o algún compañero por su actitud, forma de trabajo o comentarios te están alterando
  • Tienes que entregar algún trabajo urgente
  • Necesitas desarrollar un proyecto y no sabes ni por donde empezar
  • En tu entorno laboral hay situaciones complicadas como recorte de personal, hay ascensos y ni con todo tu esfuerzo logras un ascenso

Esto solo es por mencionar algunos casos, sin embargo, para cada una de nosotras, las situaciones que nos estresan pueden ser distintas. Sin embargo, si hay algunas actividades que todas podemos realizar y nos ayudarán a evitar o eliminar  el estrés, ya que nos permitirán estar más relajadas con relación a todo lo que el mundo laboral nos presenta:

Algunas veces puede ser que el trabajo no sea el que nos esté causando estrés dentro de nuestro horario de trabajo, sino factores externos que llevamos a nuestro trabajo. Por ello, considera:

Traslado

El tráfico de nuestra ciudad o si el transporte público esté atiborrado de gente puede ser un factor importante para crearnos estrés, ya que si cuando nos dirigimos al trabajo está caótico el camino podrá afectarnos en la hora que lleguemos al trabajo lo que nos comienza a agobiar, y aquí hay dos acciones importantes:

  1. Prevé tu horario de salida de casa para que tengas suficiente tiempo de traslado, considerando que pueden presentarse contratiempos en tu trayecto. Así no irás con el tiempo justo por si encuentras tráfico, un problema en el transporte público o algún acontecimiento inesperado se presenta y sientas que ya te está arruinando el resto del día.
  2. Si lo que te genera estrés es la cantidad de gente que va en el mismo transporte público que tú o la cantidad de autos que están causando un tráfico complicado, una opción para que esto no te perturbe es disfrutar el camino. Ya sea que lleves unos audífonos o algún libro para leer mientras vas en transporte o que si vas en tu automóvil pongas la música que te gusta o vayas acompañada para crea un viaje más ameno.

Vida fuera del trabajo

Sea cual sea nuestra vida fuera del trabajo, en esta también pueden presentarse problemas diversos que estén afectándonos a tal grado que los llevemos a nuestra cabeza mientras estamos en el trabajo.

En este caso, lo mejor es que si te tiene inquieta algo grave, debes saber que mientras exista no podrás quitar de tu cabeza, así que mejor resuélvelo. Si es algo no tan urgente o complicado, trata de no pensar en ello y enfocarte solo en el trabajo, elimina toda distracción mental que te complique estar al 100% en tu trabajo.

Y algo también importante es que no permitas que el estrés laboral se vaya a todas las demás facetas de tu vida, así que donde te encuentres y según lo que estés realizando enfócate simplemente en eso, deja de lado todo lo que pueda interferir con tu bienestar, tranquilidad y felicidad en cada momento de tu vida.

Si el estrés si se está generando a raíz de cuestiones laborales, entonces considera estas acciones:

Organiza

Es importante que antes de iniciar tu día laboral registres todo lo que sabes deberás realizar ese día, de manera que puedas sentirte preparada para lo que viene, hayas organizado por prioridad las actividades y no haya tareas que por olvidar terminen siendo urgentes o sientas que no vas a acabarlas a tiempo. Además, si llega alguna actividad inesperada y de urgencia podrás controlar el realizarla sin que afecte a las demás.

Ordena

El lugar donde trabajamos es determinante para cómo nos sentimos y por ende cómo trabajamos. Por ello, mantén tu lugar de trabajo limpio, ordenado, sólo con lo necesario para trabajar e incluso una plantita o alguna fotografía o detallito de una persona querida te puede alegrar el panorama.

Concéntrate

Ya sea que tienes una cantidad de trabajo normal o una carga pesada que te lleve a momentos de estrés, evita distraerte constantemente platicando con compañeros, hablando por teléfono, chateando por celular, navegando en internet o redes sociales.

Todos estos distractores harán que pierdas concentración, y si dejas acumular el trabajo la tendencia será que llegue un punto donde puedas comenzar a estresarte, así que mejor evita distracciones.

Respira

Muchas veces si tenemos una carga laboral fuerte intentamos ni respirar para poder cumplir con todo lo que tenemos que hacer. Pero no hay nada peor que no darnos tiempo para tomar un poco de aire, comer, levantarnos y estirarnos un poco.

Todo esto es ideal para tener esas pausas que liberen un poco del estrés, inténtalo y seguro te hará sentir mejor. 

Disfruta

Lo más valioso de tu trabajo o cualquier lugar en el que te encuentres es que te sientas bien y tranquila, así que no te dejes saturar mental o físicamente por las tareas que tienes que realizar.

Si sigues las recomendaciones anteriores no tendrás porque estresarte ya que estarás enfocada en ir cumpliendo cada tarea y disfrutando ese proceso, así que lo mejor para evitar el estrés es que disfrutes tu trabajo.

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