¡Va muy rápido!

¡Hola! 💕 Te escribo después de 5 semanas desde mi última carta. ¿Puedes creer que ya pasó tanto tiempo? ¡Yo no! 🙃

Cuando escribí esa carta yo me encontraba en Kerala, India. Después a principios de agosto volví a México por una breve escala antes de emprender un siguiente viaje que ya lleva 3 semanas en Nueva York. ¡Aún no me cae el veinte de todo lo que ha pasado en los últimos meses y esta vida sigue avanzando!

Esto me llevó a entender que no puedo prometer escribirte con mucha frecuencia, pero si que siempre que lo haga será desde un espacio de amor, de compartirme, de conectar contigo cada que sienta es el momento correcto para mí y quizás también lo sea para ti.

Desde que estaba en la India sentía que habría posteriores cartas para expresar todo lo que había vivido en mis primeras dos etapas de viaje 1. viajar con mi mamá, hermana y sobrina y 2. pasar algunas semanas sola, aunque por momentos y días acompañada.

No quería dejar pasar el darle forma de palabras a todo lo que sentía de ambas experiencias y sin embargo el tiempo se me fue sin hacerlo, es así que estoy decidiendo en este instante que eso que viví y que te quiero compartir lo haré aquí en mi página, pero no como cartas, sino reflexiones y experiencias individuales que iré publicando poco a poco.  

Pero por ahora, para no dejarte con la duda (por si la tenías 😅) de qué pasó conmigo en la India te cuento que estuve allá más de un mes 😱 .

Los primeros 12 días conociendo algunas ciudades del norte, los siguientes 21 días en el sur haciendo un panchakarma (si no sabes de qué se trata, ya te contaré), y finalmente volví a Delhi antes de emprender mi viaje hacia México.

Imposible resumir y contarte todo lo que esos días viví, lo que India me dio; las emociones, experiencias, personas, enseñanzas y momentos que recibí.

Es así que de igual manera iré bajando todo eso para ponerlo en palabras que me permitan transmitírtelo, pero también obtener todos los aprendizajes a través de los cuales podré construir hacia adelante mi vida; así que  al menos te avisaré cuando vaya compartiendo algunas cosas en mi blog. 

Mientras tanto te puedo decir que tras este viaje me siento tan afortunada, bendecida y agradecida con la vida por todo lo que ese viaje me dio, pero también agradecida conmigo porque elegí hacerlo, porque me aventé, porque si bien había muchas situaciones que me decían que «quizás no», yo me dije, «si no es ahora, ¿cuándo?» y es maravilloso saber que sucedió en el momento perfecto, con las personas perfectas.

Así que como ves tengo mucho que contarte de ese viaje, de porque me fui queriendo ya planear un viaje para volver, pero también para hacer que otras personas vayan a India.

Y bueno, después regresé a México, pero al principio te contaba que ya llevo algunas semanas en Nueva York porque para seguir «mi viaje» elegí hacer karma yoga (voluntariado) por mes y medio en un Ashram que se encuentra acá.

Así que las experiencias no paran y de esta también tendré mucho que contarte. De entrada, si no sabes qué es un Ashram o qué es karma yoga me gustará compartírtelo; y también lo que aquí estoy viviendo, las experiencias, enseñanzas, retos, reflexiones y mucho más que me está dando este lugar.

Ya por ahora no quiero extenderme porque sino no terminarás de leerme, pero cerraré diciendo lo que mencioné en mi primera historia de instagram al comenzar el primero de esta serie de viajes; que estaba por crear mi versión de la película  «Comer, rezar, amar».

Y sabes, hoy veo que sí, estos meses han sido algo así, pero me encanta saber que mi versión es distinta a la película, incluso diría yo que «mejorada» 🥰 , así que me siento muy feliz de haber decidido protagonizar mi propia vida. 

Te envío un abrazo grande y nos leemos muy pronto. 

Ari 💜